HISTORIA DE LA ORDEN DE SAN AGUSTÍN
«Si anacrónico resulta hablar de Orden de San Agustín en el siglo IV según la actual estructura jurídica, también lo es el llamar a San Agustín "fundador" de la Orden Agus-tiniana tal y como surgió en el siglo XIII. Tanto la «Unión Fundacional» de 1244 como la "Gran Unión" de 1256, urdidas por la Sede Apostólica, indican el nacimiento y consolidación de una nueva
Orden religiosa formada por la unión de varios movimientos de ermitaños de Toscana, Juambonitas, Bréttinos, Guillermitas y de Monte Favale, adoptándola forma de vida según la Regla de San Agustín y la organización propia del modelo de las órdenes mendicantes.
Una gran parte de la historiografía agustiniana, desde el siglo XIV y en menor medida a partir del siglo XX, aborda esta cuestión histórica en una forma no-histórica, dando pie a falsificaciones y tradiciones míticas que falsean la realidad al proponer a San Agustín como el fundador histórico de la Orden de Ermitaños de San Agustín. Esta «leyenda agustiniana», formada a contra pie de la historia, ha sido desenmascarada por la investigación histórica seria, rigurosa y crítica. El Hiponense no puede ser considerado el "fundador" en sentido propio del término —el que funda, instituye oerige—, puesto que la Orden de Ermitaños de San Agustín surgió en el contexto histórico, social y religioso del siglo XIII por voluntad explícita de la Iglesia.»